Durante el ciclo menstrual… ¿Sabes cómo sacar el máximo rendimiento a tu rutina de ejercicios diarios?
Entender cómo afecta el ciclo menstrual al cuerpo de la mujer es fundamental para adaptar de manera efectiva la forma de plantear tus ejercicios diarios (seas deportista o no). Conocer las distintas fases del ciclo y los cambios hormonales que conllevan puede marcar la diferencia en tu rendimiento físico, la prevención de lesiones y el bienestar general.
En este artículo, te explico cómo entrenar según cada fase del ciclo menstrual para aprovechar al máximo los beneficios del ejercicio y respetar las necesidades de tu cuerpo.
Fases del ciclo menstrual y su influencia en el ejercicio:
1. Fase folicular:
Durante los días 1 a 12 del ciclo menstrual, se experimenta la fase folicular, caracterizada por el crecimiento de los folículos ováricos.
En esta etapa, las mujeres podemos aumentar la intensidad y duración de nuestros entrenamientos. Sin embargo, es importante tener en cuenta la subida de estrógenos y relaxina, lo que puede aumentar la laxitud de los ligamentos y predisponer a lesiones, especialmente en deportistas.
2. Ovulación:
La ovulación ocurre aproximadamente en el día 14 del ciclo y dura tres días. Durante este período, el rendimiento físico alcanza su pico máximo, lo que permite priorizar entrenamientos de mayor intensidad.
A medida que pasan los días después de la ovulación, los niveles de estrógeno disminuyen y la progesterona aumenta.
3. Fase lútea:
Desde el día 16 al 28 del ciclo, se encuentra la fase lútea. Durante los primeros días de esta etapa, la combinación de estrógenos y progesterona facilita el mantenimiento de un buen rendimiento físico. Sin embargo, hacia el final de esta fase, la alta concentración de progesterona puede provocar cambios en el estado de ánimo, fatiga y retención de líquidos.
En este período, se recomiendan ejercicios cardiovasculares de ritmo constante o más tranquilos para evitar sobreesfuerzos.
4. Menstruación:
La menstruación, que ocurre alrededor del día 28 del ciclo, puede asociarse comúnmente con una disminución del rendimiento físico. Sin embargo, el ejercicio durante este período puede ser beneficioso, ya que estimula la producción de endorfinas, neurotransmisores que generan sensación de placer y disminuyen la fatiga.
Los ejercicios suaves y de bajo impacto pueden ayudar a aliviar los síntomas menstruales y mejorar el bienestar general.
Conclusión
Entender los niveles hormonales según la fase del ciclo menstrual es esencial para optimizar las rutinas de ejercicio diario y garantizar el bienestar general.
Adaptar la manera de moverte y de ejercitarte según las fluctuaciones hormonales, te permite aprovechar al máximo los beneficios del ejercicio y minimizar el riesgo de lesiones. Al escuchar y respetar las necesidades de nuestro cuerpo a lo largo del ciclo menstrual, podemos alcanzar un rendimiento óptimo y mejorar nuestra salud y bienestar en general.
Espero que te haya resultado útil toda esta información para poder aplicarla en tu día a día, tanto si eres deportista o no. Y si te interesa adentrarte en un tipo de trabajo corporal respetuoso y acorde a tus necesidades como mujer, puedes contactar conmigo para ayudarte a sacar partido a todas tus posibilidades.